Torre Samsung Jong-no
Al repensar el programa y crear tres volúmenes edilicios únicos pero conectados, se logró que la Torre Samsung Jong-no sea un edificio emblemático de la ciudad, inmediatamente reconocible, que incorpora oficinas, entretenimiento y un icónico restaurante ubicado en el volumen que se encuentra suspendido en lo más alto de la torre.
No satisfecha con el diseño de la torre de 20 pisos que se estaba edificando en Seúl, Corea, la empresa Samsung detuvo la construcción y lanzó un concurso limitado de diseño en 1994 con la esperanza de poder salvar los 17 pisos de estructura metálica y las losas de hormigón ya erigidos. Viñoly ganó el concurso con una nueva concepción del programa y creando tres volúmenes individuales pero conectados. El diseño resultante es un complejo de uso mixto con oficinas, instalaciones de ocio y un icónico restaurante ubicado en el volumen que se encuentra suspendido en su parte superior, lo que hace de la Torre Samsung Jong-no un edificio emblemático de la ciudad inmediatamente reconocible.
El volumen inferior de 12 pisos, construido a partir de las losas preexistentes, está orientado al centro de la ciudad, cuenta con un muro cortina formado por una estructura de cristal convexa y contiene oficinas abiertas. Las terrazas ubicadas en la cubierta de este volumen proporcionan una amplia vista de la ciudad a sus inquilinos. Separado de las oficinas inferiores por dos pisos de instalaciones mecánicas, Viñoly diseñó un volumen rectangular de ocho pisos que aloja espacios de oficina adicionales, pero que se distingue de la estructura inferior por su fachada plana.
Un núcleo circular similar a un tubo, que alberga las escaleras y un ascensor, se eleva en cada una de las tres esquinas de este edificio de forma aproximadamente triangular y se extiende por encima de los bloques de oficinas para sostener la “nube”, un restaurante y bar de doble altura con forma de anillo que flota sobre el paisaje de la ciudad y ofrece vistas de 360 grados de Seúl.
Ubicada en un cruce destacado de la ciudad, la Torre Samsung Jong-no se aleja de la intersección de las calles céntricas, dejando aproximadamente un tercio del emplazamiento sin construir para crear una plaza pública a nivel de la calle. Una cornisa de escala urbana en voladizo, soportada por una estructura de vigas de acero, corona el volumen inferior del edificio y se asoma 10 metros sobre la esquina vacía del emplazamiento, protegiendo simbólicamente la plaza pública que se encuentra frente a la estructura.
Bajo tierra, una explanada subterránea conecta el edificio con los espacios existentes y comerciales, así como con una zona de restaurantes.